Con estas circunstancias, a uno le asaltan las dudas y empieza a dudar si es posible preparar pruebas de larga distancia de una forma óptima.
Hay un factor invariable y con el que cuento siempre a principio de temporada que es mi trabajo con sus múltiples viajes. Este factor ya lo tengo contemplado y planeado y con una planificación adecuada lo puedo resolver (con planificación y algo de sacrificio).
Hay otros temas ajenos como son las condiciones atmosféricas con el que no se puede contar y este invierno es un buen ejemplo. Desde principio de año, el viento y la lluvia no nos ha dado tregua.
Con todo ello, es casi una utopía hacer una seguida y realizar un mesociclo con éxito.
Además, los fantasmas del pasado vuelven a sobrevolar sobre mi y mi ciático vuelve a dar problemas habiendo interrumpido la progresión en carrera a pie.
Ya me he puesto en manos del Dr. Fernando Moreno, mi Ángel de la Guarda y confio en que noquearemos la lesión en cuestión de días y podré hacer acto de presencia en el Duatlon de Sueca aunque sea a medio gas.
Nadie dijo que esto fuera fácil y estos contratiempos son parte de la preparación y la temporada. Siempre aparecen momentos difíciles cada año durante la preparación de grandes retos debido a la gran exigencia. La experiencia me dice que hay que mantener la calma y que de todo se sale.
Lo positivo es que en el agua he dado un salto importante y en bici estoy refrendando la progresión de los últimos años. Mi fuerte que es la carrera a pie tendrá que ser paciente, pero no me cabe duda que lo podré superar satisfactoriamente.
Un consejo para todo aquel que se encuentre en esta tesitura que se que somos una cuantos: ILUSIÓN y PERSEVERANCIA. A mi me funciona muy bien.
Buenas noches.
No hay comentarios:
Publicar un comentario