3 meses es lo que falta a partir de hoy para mi gran objetivo del año, para el que llevo 360 días preparándome.
La verdad es que no le temo en absoluto. Puede ser mi 3er finisher y ya sé lo que me espera. Sé a que me va a someter el IM. Lo que sí le tengo es el respeto que nunca hay que perderle a la distancia reina del triatlón, a la prueba por excelencia de 1 día.
Más me preocupa el tema logístico de envío de bicicleta y demás que el IM en sí. Será definitorio que sepa leer la prueba y no me deje llevar por esos momentos de éxtasis que te hace vivir el gran gigante y que luego te pueden chafar con todo su peso. Para eso me tiene que servir la experiencia de Zurich y Roth.
Lo que sí que es cierto es que estoy ansioso por llegar. Querría que fuera mañana y eso es una buena señal.
IM es algo muy grande, una forma de vivir la vida. Más allá de los tiempos y de las marcas, es la ILUSIÓN de todo un año, la culminación a mucho esfuerzo, un día de fiesta. Lo dicho, una manera de vivir.
Cuelgo una canción que estoy deseando escuchar allí con Mar y Daniella y que con tal belleza no podía estar inspirada en otra ciudad que no fuera NEW YORK.
SEE YOU SOON NY!
Hoy recién llegado de viaje, con 10 horas de vuelo, no me lo he pensado y por necesidad me he ido a entrenar. Necesario para volver en si. Cuando llego de viajes largos mi cuerpo me pide actividad para volver a sentir como circula la sangre y para sentirme vivo otra vez.
Han salido 7,5 km de running, 45´de fuerza máxima en el gimnasio y 1.600 metros de piscina con técnica.
Vamos!!
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